Solicitamos su permiso para obtener datos estadísticos de su navegación en esta web, en cumplimiento del Real Decreto-ley 13/2012. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies. OK | Más información

 

 

EL ARTE DE LA ESTRATEGIA

-???-


150 cuentos sufíes

Pensamiento de Oriente

Los cuentos incluidos en este volumen han sido extraídos del Matnawi, obra esencial de Rumi, fundador de la orden de los derveches giróvagos, poeta, místico y sabio del siglo XIII. Considerado como un comentario del Corán, el Matnawi no sólo se estudió en el marco de las cofradías, sino también en las mezquitas. Aparecieron comentarios y traducciones del persa y el libro se convirtió en una de las fuentes reconocidos de la enseñanza tradicional. Versículos del Corán, Hadizs, leyendas bíblicas, cuentos hindúes o budistas, anécdotas de la vida diaria: todo ello provoca la inspiración de Rumi e ilustra la enseñanza sufí, que se muestra así como tradición viva, sencilla y accesible para todos, es decir, como sabiduría universal.


Lenguaje corporal

El lenguaje silencioso que nunca miente explicado de forma fácil y sencilla.


Seducir y enamorar

¿Sabes todo sobre la seducción? Si te gusta seducir, esto te interesa. Ahora puedes descubrir todos los secretos para seducir.


Poder mental

Ni te imaginas lo que tu mente puede hacer por ti. Hipnosis, concentración, sueño, relajación, meditación, grafología, PNL...


Liderazgo y rendimiento

Las 21 leyes sobre liderazgo, los 7 hábitos de la gente realmente efectiva, el 8º hábito, método DAFO, la pirámide de Maslow, ...


Relaciones con las personas

Cómo conocer a las personas y relacionarte con ellas, ganar verdaderos amigos, técnicas de Persuasión y de Negociación, entrevista de trabajo, aumentar tu confianza y asertividad, ...


Finanzas personales

Cancelar deudas, ahorrar, ganar mas dinero, invertir, saber usar el dinero y cultura economica y financiera.

EL PREDICADOR
Había un predicador que, cada vez que se ponía a rezar no dejaba de elogiar a los bandidos y desearles toda la felicidad posible. Elevaba las manos al cielo diciendo: "¡Oh, Señor: ofrece tu misericordia a los calumniadores, a los rebeldes, a los corazones endurecidos, a los que se burlan de la gente de bien y a los idólatras!"
Así terminaba su arenga, sin desear el menor bien a los hombres justos y puros. Un día, sus oyentes le dijeron:
"No es costumbre rezar así! Todos estos buenos deseos dirigidos a los malvados no serán escuchados."
Pero él replicó:
"Yo debo mucho a esa gente de la que habláis y por esa razón ruego por ellos. Me han torturado tanto y me han causado tanto daño que me han guiado hacia el bien. Cada vez que me he sentido atraído por las cosas de este mundo, me han maltratado. Y todos esos malos tratos son la causa por la que me he vuelto hacia la fe."


Derviches sufíes

ABANDONAR LA COLERA
Un día, alguien preguntó a Jesús:
"¡Oh, profeta! ¿Cuál es la cosa más terrible en este mundo?"
Jesús respondió:
"¡La cólera de Dios, pues incluso el infierno teme esta cólera!"
El que había hecho la pregunta dijo entonces: "¿Existe algún medio para evitar la cólera de Dios?"
Jesús respondió: "¡Sí! ¡Hay que abandonar la propia cólera! Pues los hombres malvados son como pozos de cólera. Así es como se convierten en dragones salvajes."
Es imposible que este mundo ignore los atributos contrarios. Lo importante es protegerse de las desviaciones. En este mundo, la orina existe. Y la orina no podrá convertirse en agua pura sin cambiar de atributos.


Derviches sufíes

LA INCITADORA
Un día, un sufí volvió a su casa de improviso. Ahora bien, su mujer recibía a un extranjero, procurando incitarlo.
El sufí llamó a la puerta. No era su costumbre abandonar la tienda y regresar tan pronto a la casa, pero, dominado por un presentimiento, había decidido regresar ese día por sorpresa. La mujer por su parte, estaba muy segura de que su marido no volvería tan pronto. Dios pone un velo sobre tus pecados para que un día te avergüences de ellos. Pero ¿quién puede decir hasta cuándo dura este privilegio
?En la morada del sufí no había escondrijo alguno ni otra salida que la puerta principal. Ni siquiera había una manta bajo la cual habría podido ocultarse el extranjero. Como último recurso, la mujer vistió al extranjero con un velo para disfrazarlo de mujer. Después abrió la puerta.
El extranjero con su disfraz parecía un camello en una escalera. El sufí preguntó a su mujer:
"¿Quién es esta persona con la cara velada?"
La mujer respondió:
"Es una mujer conocida en la ciudad por su piedad y su riqueza."
"¿Hay algún favor que podamos hacerle?" -preguntó el sufí.
La mujer dijo:
"Quiere emparentar con nosotros. Tiene un carácter noble y puro. Venía a ver a nuestra hija, que, desgraciadamente, está en la escuela. Pero esta señora me lo ha dicho: "¡Sea o no hermosa, quiero tenerla como nuera!" pues tiene un hijo incomparable por su belleza, su inteligencia y su carácter."
El sufí dijo entonces:
"Somos gente pobre y esta mujer es rica. Semejante matrimonio sería como una puerta hecha mitad de madera y mitad de marfil. Ahora bien, un vestido hecho a medias de seda y de paño avergüenza a quien lo lleva."
"Es justamente lo que acabo de explicarle -dijo la mujer-pero me ha respondido que no le interesan los bienes ni la nobleza. No ambiciona acumular bienes en este bajo mundo. ¡Todo lo que desea es tratar con gente honrada!"
El sufí invocó otros argumentos, pero su mujer afirmó haberlos expuesto ya a su visitante. A creerla, aquella señora no tomaba en cuenta su pobreza, aunque ésta fuese extremada. Finalmente, dijo a su marido:
"Lo que busca en nosotros es la honradez."
El sufí añadió:
"¿No ve nuestra casa, tan pequeña que no podría esconderse en ella ni una aguja? En cuanto a nuestra dignidad y nuestra honradez, es imposible ocultarlas pues todo el mundo está al corriente. ¡Tiene, pues, que suponer que nuestra hija no tiene dote!"
Te cuento esta historia para que dejes de argumentar. Pues nosotros conocemos tus vergonzosas actividades. Tu creencia y tu fe se parecen, hasta confundir a cualquiera, a los discursos de esta mujer. Eres un mentiroso y un traidor como la mujer de este sufí. Te avergüenzas incluso ante gente que no tiene rostro limpio. ¿Porqué no habrías de avergonzarte, por una vez, ante Dios?

Fuente:
150 cuentos sufíes. Yalal al-din Rumi
Descargar extracto



-???- | -???-